No me olvido de uno que se hizo el electricista una vez y me dijo: "las minas arreglan todo con un cuchillo de cocina", lo miré y sentí resignación (además de ganas de abrirlo como a un surubí), te juro. He arreglado cientos de miles de millones de cosas con los cuchillos, la vez que me quise hacer la legal usando un phillips donde correspondía o una llave cruz, o una alen, o una francesa o una pata de cabra...terminé con un tajo en alguna parte de mi sufrida anatomía.
Se arregla...hasta un velador hice una vez con un cuchillito de morondanga que, ni a tramontina llegaba.
Mi madre me enseñó cosas que, a su vez, su padre le enseñó...cosas que se supone las mujeres no deberíamos saber y así nos tiramos panchas a depilarnos mientras que los "hombres" se ocupan. Resulta que, a mí no me gusta tirarme a depilarme, me gusta aprender y despanzurrar, como hace un ratito, mi cpu para descubrir que el ruidito inquitante y sórdido era, nada más y nada menos que...mugre.
Me gusta hacer un alarguecito para tener luz como debe ser en el patio, pavadas...nada del otro mundo, mi madre sí es experta plomera, albañila, electricista y da unas órdenes que son una alegría para cualquier regimiento.
Dice que su padre le decía "vení y aprendé que andá a saber con qué inútil te casás".
No tengo ganas de romperme la cabeza analizando el por qué de los por qués, la sentencia de "el día que te cases" o "las minas esto...las minas lo otro" sabemos sobradamente que son burradas (con perdón de los jumentos) que se dicen sin pensar y que una, para no pelear, mira con cara de perro cagando bajo la lluvia.
Estoy contenta de que esté empezando al fin el fresquete por estos pagos a la vez que, debo comprar un par de estufas y hago cuentas mmmm no sé che, dicen que el frío te conserva. Estoy contenta de que a S.Menor se le haya caído el tercer diente y esta vez haya sido sin sustos porque ¡Oh! le sale sangre...y sí nena, no te va a salir cocacola, claro que esa no es respuesta de una madre que se precie de ser buena.
Estoy contenta porque S.Mayor está entusiasmada entre sus apuntes, mate y la discursiva de lanoséqué, estoy contenta porque en mi laburo corren vientos de cambio y mi flamante jefecito es lindo, simpático, inteligente, atento...ya se le va a pasar, pero mientras ando ofreciendo su dirección de correo electrónico a las pibas del barrio que se clavan agujas en los ojos cuando lo ven pasar.
Solucioné un montón de problemas en el laburo hoy, terminé con las patas que me latían vertiginosamente...creo que en Shirley Valentina un griego le decía que si te dolía algo era bueno porque estabas vivo, eso me animó más.
Veo que llevo conmigo una gran caja de ferramientas (culpa de S.Mayor que estudia en voz alta casteliáno antiguo) algunas son "posta" otras clips, hebillas invisibles, cuchillos tramontina y de los paletudos que sirven para sacar tornillos que no tienen cruces (no sé cómo se llaman y gúgle no domina enteramente mi vida, aún), llevo una buena carga de valentía por si hace falta, un poco de desconfianza porque, nunca se sabe y cinta aisladora, para las heridas de amor....juááá me fui al carajo.
Estoy contenta porque esta vez no me importa que se me pase....la contentera digo.