3/6/13

Corte de papel

'No hay libro bueno sin su atribución estilística, de la que nadie puede prescindir —excepto su escritor.'
J.L. Borges


Romper con todo lo que tenés establecido mientras te sometés despacio a vos mismo.
Tomar decisiones constantemente y asumir las responsabilidades por ello implica que vas cambiando de a poco que te vas ¿adaptando? ¿a qué? ¿al entorno? ¿a lo que los demás quieren? ¿a lo que necesitás en el momento?
Bullen las historias contadas como únicas, yo sólo largo algo, un pedacito de mí, una idea que dejo que vaya saliendo de a poco.
Alguna vez pensé que las letras y este hambre que no se sacia de libros, de hojas, de ese aroma que sale de los libros viejos, amarillentos era una especie de vicio que iba a tener fin pero no, no hay caso, siempre hay una necesidad imperiosa de escribir aunque sea la lista del mercado, siempre hay libros por leer y mundos por descubrir, cada vez que abro uno imagino que es un planeta nuevo y si es del mismo autor al que vengo siguiendo, como distintas partes de la casa que construye con lo que escribe. Cada vez que termino de leer la última hoja, no puedo evitar la angustia de tener la certeza de que jamás voy a terminar de leer todo lo que se escribió y se escribe porque quiero saber, quiero conocer, quiero aprender y es un ansia que no tiene fin, aceptarla como es forma parte del sometimiento a mí misma.
Quiero saber todo, tan imposible como eso.
Y así es como tengo miles de pequeñas cicatrices en mis dedos de los cortes de papel pero no es por manipular tantos libros sino por mi trabajo, igual siempre queda más romántico decir que es por tantas hojas que paso entre mis manos.

4 comentarios:

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

Creo que no se puede romper con todo, que algo puede servir.
También tengo ese hambre insaciable de libros, también se extendió a los comics, de autores que también tienen ese hambre insaciable, que se nota en referencias literarias.
No había pensado en eso de todo lo que hay que leer.
En lo que suele pensar en algunos de los que han escrito esos libros han pensado en algo similar a lo que suelo pensar.

Abrujandra dijo...

Por algo el viento nos arremolina Demiurgo.

el oso dijo...

Un día me agarró una desazón terrible esa certeza que usted comenta: hay una cantidad enorme de libros valiosos que no llegaré a leer.
Otro día me dije: Si no voy a poder leer todos, voy a releer aquellos que me fascinaron. Y lo hice, y lo hago.
No son muchos, pero vuelvo a dialogar con algunos capos que ignoran mi existencia.
Pero yo les hablo igual, qué me calienta.
Besos

Abrujandra dijo...

Y bueno, hablar con los capos siempre te saca de dudas, yo sigo hablando con mi abuela muerta y ella me contesta, tampoco me calienta.
Besos.