10/5/15

A veces no me contengo

Repito como mantra 'no me voy a pronunciar sobre religión, política, medios de comunicación' en una época lo hacía y casi me sale sangre negra por los ojos, admito que de tanto en tanto no logro contener mis deditos y me las mando. Habiendo crecido rodeada de papeles impresos, filosóficas charlas de mi abuela correntina que, a duras penas hizo el 6to grado de la escuela primaria, mi madre de la que aprendí a 'ver' la pintura, la música, el baile, cantar, tejer, coser, de mi padre que trabajó en los medios durante toda su vida, demás gentes...bueno, uno es lo que le dicen, después lo que entendés y podés. No tengo la menor idea cómo fue que muy pibita me dí cuenta que siempre iba a haber alguien que me dijera lo que tenía que hacer pero 'voilá' nadie se podía meter en mi cerebro si no lo dejaba y así es como firmemente (creo que ridículamente porque lo recuerdo como si fuese ayer) mis catorce años y yo nos miramos en un espejo (elemento importante para estos menesteres) nos juramos no dejar que jamás nadie nos diga qué pensar ni sentir.
Hallo una muestra (pequeñísima) de lo que una empresa de la envergadura de CNN largue un artículo así (como cientos de miles de millones que han largado así), me refiero al artículo que enlazo (no me gusta decir 'linkeo' cuando escribo en mi lengua materna) a continuación.
A ver si alguien que esté sin muchas cosas que hacer se toma un rato y lo lee, cuéntenme ¿cuántos errores hallan? o una pregunta mejor ¿de verdad piensan que somos todos giles?  ah, sí, de eso viven y muy bien.