16/2/13

Tetongas

-Novio de S. Mayor, al que en poquísimas ocasiones la cabeza le funciona como si aún tuviera catorce años (o doce a tiempo contemporáneo), el resto del tiempo es un chico centrado, divertido y muy inteligente, le metió mano a mi maniquí. 
-La casa de la mamá de la novia que limpia cuando se acuerda o....

-Cuando los gérmenes amenazan con matarla en un plazo perentorio de no más de veinticuatro horas.
-Cuando no encuentra la pinza de depilar.
-Cuando no sabe cuál es el camino al baño.
-Cuando no halla los lugares en los que dejó los tres libros que está leyendo casi simultáneamente.
-Cuando repasa con mirada perdida el horizonte de caos casero con el índice derecho en la boca mientras piensa repetidamente como mantra: Yo tenía aguja de crochet nro. 8 estoy segura.

Y así es que muchas cosas que limpio están al lado de las que paso por alto como este maniquí.
Es divertido que la vida te dé estas sorpresas y que encima pienses que le puede interesar a alguien tanto como para hacer una entrada en un blog de ello.

                                                                                              La madurez me viene pegando mal.


Reglas de oro para la poco limpiadora: cocina y baño siempre impecables ya que son los lugares más importantes de la casa.
Regla de platino premiun (¿premium?)de mi abuela: se limpia y ordena sólo para no enfermarse y para encontrar las cosas, la fijación de la limpieza es de gente que está muy, pero muy enferma de la cabeza.

2 comentarios:

el oso dijo...

El pibe se entretiene lindo...

Abrujandra dijo...

Oso: calculo que sí, no le basta con las de S. Mayor que me tiene que agarrar el maniquí che. Fijación total.